¿Qué provoca las vibraciones en el volante? Los neumáticos, la dirección mal alineada o la suspensión en mal estado son los motivos principales.

La vibración del volante del coche es una situación que a veces se da cuando el vehículo supera los 80 km/h.

Una de las causas más habituales que lo provocan es el mal equilibrado de los neumáticos. Este motivo es uno de los más peligrosos y puede ser como consecuencia de unas cubiertas viejas, desgastadas y secas. A esto se suma un mal equilibrado debido a la pérdida de contrapesos o por la deformación de la llanta a causa de un golpe. No obstante, la sensación de vibración solo se percibe a un rango determinado de velocidad.

Si la dirección no está bien alineada, el conductor percibe una sensación de flotabilidad que le obliga a corregir el volante hacia un lado u otro. Esta desviación se puede deber a que las rótulas de las barras de acoplamiento hayan cogido holgura, lo cual provoca el desequilibrio de la dirección.

La suspensión en mal estado también puede provocar falta de eficacia en el frenado y afectar al desgaste de los silentblocks. Aunque este último aspecto no es un problema directo para el vehículo, sí que puede provocar averías en otras partes del vehículo.

Por otro lado, los fallos en algún elemento del motor también pueden provocar vibraciones, así como la falta de aire o combustible en los cilindros durante la propulsión, un fallo de las bujías, rodamientos en mal estado. Tampoco hay que olvidar el desgaste de las juntas homocinéticas derivado del roce y gripado de estas por falta de lubricación.

Qué puedo hacer si mi coche vibra: SOLUCIONES

Antes de nada, deberá detectar y determinar la fuente de vibración.

Compruebe el estado de sus neumáticos. Si están desgastados, ruedan de manera desigual o presentan una falta de redondez, deberán ser sustituidos. Es aconsejable comprobar también la presión de los neumáticos.

Cuando sustituimos los neumáticos es importante hacerlo en un taller autorizado, puesto que hay que equilibrarlos correctamente para evitar vibraciones en el habitáculo.

Cuando el problema se encuentra en la desviación de la dirección, la solución más habitual a realizar es una correcta alineación y paralelo del sistema de dirección del vehículo. Para ello, nuestro taller mecánico cuenta con una máquina de alineación en 3D y tecnología avanzada.

Si el coche solo comienza a vibrar cuando se efectúa la maniobra de frenado probablemente la causa se encuentre en unos rotores desgastados o los discos de freno deformados. Si sus rotores no presentan daños graves, pueden ser limpiados y restaurados. De no ser así, su sustitución sería la única opción disponible. Si los discos de freno no están planos se puede notar cómo vibra el coche a cierta velocidad al presionar el freno. Su sustitución sería lo correcto.

Si la vibración aparece al realizar maniobras de giro y el volante tiembla o si observa fugas del líquido de la dirección asistida, habrá llegado el momento de visitar a su taller de confianza para una revisión especializada.

Las razones expuestas en este artículo sobre el origen de las vibraciones de su coche, son las más habituales. Siempre resulta recomendable y conveniente acudir a profesionales en el mantenimiento y reparación del automóvil, independientemente de cual sea la causa.

Detectar y solventar problemas en su coche durante las primeras etapas le ayudará a evitar problemas de mayor envergadura que podrían traer consigo indeseables y costosas facturas en reparaciones.